Descripción
El Tomillo es una planta medicinal con un fuerte efecto desinfectante, que se usa comúnmente para la tos, la bronquitis o el dolor de garganta, a menudo se prepara en forma de infusiones, tinturas, cápsulas o jarabe.
En el antiguo Egipto, el Tomillo se utilizaba para embalsamar. Los antiguos griegos lo usaban como incienso en los templos y también en las aguas de baño. Los romanos lo usaban como saborizante para el queso y el alcohol, y también se conocía como una cura para la gente melancólica o tímida. Hipócrates, que vivió alrededor de 460 aC a 370 aC, y que ahora es conocido como «el padre de la medicina occidental», recomendó Tomillo para enfermedades respiratorias.
Para cocinar podemos encontrar tomillo fresco o tomillo seco. El tomillo fresco es mucho más sabroso, pero debe guardarse en el refrigerador y consumirse dentro de 1 a 2 semanas. El tomillo seco o el tomillo en polvo se pueden almacenar hasta 6 meses en un lugar fresco y oscuro. La versión de tomillo seco puede reemplazarse por el tomillo fresco en la mayoría de las recetas. Una cucharadita de hojas secas equivale a una cucharada de tomillo recién picado. Para fines medicinales, se puede comprar en forma de té, extracto, suplemento o aceite esencial. Para uso diario, el tomillo seco o fresco se puede utilizar en varias recetas como carne, pollo, pescado, verduras, sopas, frijoles, salsas..
El tomillo es excelente para ayudar a los sistemas inmunológico y respiratorio, así como a los sistemas digestivo, nervioso y otros sistemas de nuestro cuerpo. Además, es un potente antioxidante que contiene gran cantidad de vitaminas A y C, es un diurético natural y estimula el apetito.